- Manchado (en ginecología se llama spotting) en torno a la ovulación o antes de la regla: esto es el sangrado de escasa cantidad que dura 1 o 2 días en la ovulación, o sea: a) a la mitad del ciclo (si tu ciclo tiene 45 días, en torno al día 22º) o b) los días previos a la llegada de “la inquilina”. Esto puede producirse por los cambios hormonales que vivimos a lo largo de nuestro ciclo.
- Irregularidad: nos referimos a cuando esa periodicidad de repente, durante 1 o 2 ciclos, es distinta a la habitual tuya. Por ejemplo, tienes ciclos menstruales de 24 días y llevas dos meses teniéndola cada 27 días. no te preocupes: el estrés, los cambios bruscos de peso, los viajes, los antibióticos, otras medicaciones, suplementos, actividad física muy distinta de la habitual… pueden afectar a tu periodo menstrual. Eso sí, si la irregularidad durara más tiempo que 1 ó 2 ciclos, yo iría a la ginecóloga.
- No te baja, ausencia (amenorrea): Puede suceder una o dos veces en un año (12 ciclos menstruales) que no nos venga la regla o tengamos un ciclo demasiado corto (muy, muy corto: por ejemplo, 2 veces en 20 días). Anótalo todo, intenta apuntar y reconocer si has tenido disgustos, estrés fuerte, o cambios de dieta y medicación y, si no retorna la regla en 2 ciclos, ve a la ginecóloga y procura que te realice análisis endocrinos. En principio no es preocupante, solo si se manifestara varias veces en un año.
En resumen: usa alguna app o libreta de ciclo menstrual para no fiarte de tu memoria. Esto es útil también para la ginecóloga y endocrinóloga, que siempre en consulta te van a preguntar la Fecha de Última Regla (FUR).
Deberías ir a una especialista cuando:
- tengas dolor menstrual que te impida hacer tus actividades: salir con amigas/os, tareas domésticas, estudiar/ir al instituto/universidad/al trabajo…
- Cuando tengas un sangrado irregular.
- no tengas sangrado menstrual. Si a los 16 años no nos ha venido la regla hay que consultar a un especialista. También si, cuando han existido reglas normales, dejamos de tenerla durante más de 2 ciclos.
- sangrado mucho más abundante de lo habitual, más de 80 ml (si no estás enferma) o 150 ml (si tienes endometriosis, adenomiosis o miomas), o, por el contrario, la regla ha disminuido excesivamente: menos de 5 ml (hipomenorrea).
- Cuando nuestra regla empieza a durar menos de lo habitual y se mantiene así durante varios ciclos (oligomenorrea), o dura más de normal, manteniéndose así a lo largo de 2-3 reglas (polimenorrea). Ciclos de menos de 24 días o de más de 35.
- Cuando sangramos durante la menopausia, o cuando consideramos que ya se nos había retirado la regla.
Es importante acudir a la ginecóloga cuando notemos alteraciones en nuestra regla. Éstas pueden deberse a causas orgánicas (pólipos, miomas, quistes de ovario, hiperplasias endometriales, etcétera) o causas “funcionales”, lo que quiere decir que se deben a alteraciones hormonales. También por supuesto, puede ser por una combinación de ambas (endometriosis). El tratamiento dependerá de la causas. No te asustes pero pon remedio. Cuanto antes, mejor. Te ahorrarás anemia, fatiga, malestares y complicaciones.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]